Ante los efectos del fenómeno climático de El Niño, que se prevé llegue a finales de año, el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi) lleva a cabo un plan para la evaluación de viviendas a nivel nacional.

Tras el cambio de alerta amarilla a naranja por parte del COE Nacional ante el fenómeno, el Miduvi informó que continúa con la implementación de un plan de respuesta ante la eventual emergencia que provocaría el suceso natural en el país.

Hasta el 31 de octubre, la institución amplió el llamado nacional a profesionales, egresados o estudiantes universitarios de los últimos semestres de las carreras de arquitectura, ingeniería civil, geografía y afines, para registrarse como voluntarios y conformar brigadas de evaluación de viviendas post emergencia.

Posteriormente, los inscritos recibirán capacitaciones por parte del personal técnico del Miduvi y obtendrán una certificación que les avalará como brigadistas de la institución para efectuar labores de ayuda en territorio.

Por otra parte, el Miduvi inició un trabajo de fortalecimiento de capacidades dirigido a los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) de las 17 provincia declaradas en alerta naranja, mediante 6 talleres en territorio.

El primero se cumplió este 17 de octubre en Esmeraldas y continuarán hasta el próximo 31 de octubre de 2023, en Quito, Machala, Samborondón, Portoviejo y Guaranda.

Las temáticas que se abordarán en estos talleres son: resoluciones de planificación territorial (Planes de Uso y Gestión de Suelos (PUGS) y de Ordenamiento Territorial (PDOT); Plan de acción y respuesta ante el Fenómeno El Niño; evaluación y calificación de beneficiarios para viviendas; y, lineamientos para el derrocamiento de infraestructuras afectadas.

En el marco de las acciones de prevención, el Miduvi ha señalado que trabaja articuladamente con los municipios, gremios y academia “con el objetivo de fortalecer las capacidades locales y velar por la seguridad y la vida de la ciudadanía”.

El Gobierno declaró en septiembre pasado la alerta naranja ante la “inminente” llegada del fenómeno climático.

Provocado por un calentamiento periódico en las aguas del océano Pacífico, el Niño suele afectar a Ecuador con intensas lluvias, inundaciones y deslaves.

Asimismo, el Gobierno advirtió en junio que el fenómeno de El Niño podría causar en 2023 estragos similares a los que provocó entre 1997 y 1998, cuando dejó casi 300 muertos y pérdidas estimadas en unos 3.000 millones de dólares, según cifras oficiales.