Cerca de 1.500 hectáreas de arroz y cacao han sido arrastradas por el agua.

La belleza serena del río Santa Rosa, sector La Maravilla, cantón, Montalvo, se transformó en una tragedia.

El desbordamiento de las aguas no solo marcó el fin de un atractivo turístico, sino que también desencadenó una serie de desastres, rompiendo muros y alterando drásticamente la vida de cientos de personas.

Aproximadamente 300 familias se encuentran ahora aisladas e incomunicadas por la fuerza de la naturaleza, que no muestra límites ni clemencia.

La situación se agrava con otras 200 familias afectadas en las cercanías de los recintos Lola Chica y Lola Grande, sumando así un total de 500 hogares destruidos.

Los cultivos, fuente de sustento para muchas de estas familias en la zona rural, también han sucumbido ante esta catástrofe. Se estima que al menos 1.200 hectáreas de arroz y otras 300 de cacao han sido arrasadas.

Habitantes dijeron estar inquietos, pues apenas ha comenzado la temporada de lluvias, y ya enfrentan la furia de las aguas.

La magnitud de la tragedia es evidente en cada rincón del sector La

Maravilla: palizadas arrastradas, cultivos sepultados bajo toneladas de lodo y personas atrapadas en un laberinto de desolación. Sin embargo, entre las ruinas, también se vislumbra la esperanza, frágil pero persistente, que se aferra a la promesa de días mejores y a la solidaridad entre los comuneros que emerge en tiempos de crisis.

Sin agua

Las captaciones también resultaron afectadas, ya que el material obstruyó la distribución, provocando que, a partir de las 07:00 horas, trabajadores con maquinaria pesada llevaran a cabo las labores de limpieza.

Este proceso fue crucial para garantizar el suministro de agua potable a la población.

Los trabajos, que se prolongaron por aproximadamente tres horas, han culminado con éxito, logrando la pronta restauración del servicio, según informó José Campos, colaborador del Municipio de Montalvo. Se informó que un total de 150 metros de muros fueron arrastrados por las intensas lluvias, agravando más la situación.

Más damnificados

Cerca de 60 familias del sector Carlos Carriel, parroquia Chacarita, cantón Ventanas, también se han visto afectadas por las recientes precipitaciones.

Como una solución, se están habilitando albergues temporales para proporcionar un refugio seguro, hasta que el nivel del agua disminuya en su caudal o hasta que puedan ser acogidos por sus conocidos.

En la ciudadela ‘20 de Noviembre’, también conocida como ‘La Poza’, y en el sector América Campuzano, entre otros lugares este mismo cantón, se registraron los mayores impactos de las lluvias de la noche anterior. El agua acumulada alcanza una profundidad de más de un metro.